-Eres como un columpio Alex.
-¿Como un columpio?
-Si, como un columpio.
-¿Y eso por qué?
-Porque puedes estar arriba o puedes estar abajo. Imagínate un columpio. Cuando un niño se sienta en él y comienza a balancearse, el columpio coge más y más impulso, y sube y sube y sube hasta que no puede más; pero claro el niño tendrá que irse dentro de un rato, y el columpio caerá hasta quedarse abajo. Tú eres igual que ese columpio. Estás arriba en lo más alto y de repente, caes. Pero, ¿sabes que es lo mejor de ser un columpio?
-¿Qué?
-Que espera con impaciencia la siguiente subida y, créeme cuando te digo que, la disfruta el doble.
Sobre todo si da la vuelta, aún cayéndose de él. :D
ResponderEliminarMe suena de algo..
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