Te juro que al verte sentí lo mismo que la última vez.
¿Qué? ¿Ganas de echar un polvo?
Si... y de tener una vida contigo.


jueves, 14 de abril de 2011

Just people.

Considera que evolucionamos. Nos creamos, nos destrozamos pero en esencia seguimos siendo los mismos. Descubrimos sensaciones, viajamos y eso aumenta nuestras posibilidades. Decidimos no querer, no sentir, no implicarnos para no sufrir. Conseguimos olvidar lo que recordamos y recordar lo que olvidamos, de manera contradictoria pero totalmente cierta. Construimos murallas para aislarnos e islas artificiales, formando nuestro propio mundo. Seleccionamos lo bueno y desechamos lo malo, sin saber que ambos son necesarios. Disfrazamos la tristeza tras sonrisas y escondemos las lágrimas en tarros de mermelada amarga. Lanzamos al mar botellas con mensajes que nadie leerá. Soñamos imposibles que son totalmente posibles pero que están fuera de nuestro alcance. Escuchamos los silencios y silenciamos los gritos sin sentido. Hacemos oídos sordos al mundo y transitamos como ciegos sin guía. Rompemos los esquemas e inventamos prejuicios absurdos para explicar las diferencias entre nosotros. Firmamos contratos afirmando que estamos de acuerdo, pero siempre pensamos diferente que los demás. Creemos ser los únicos que no lo tenemos claro, los únicos que tenemos miedo. Manejamos la certeza de que nuestros pensamientos son extraordinarios y no siguen los patrones del resto. Dibujamos un panorama desalentador para no hacernos ilusiones. Ponemos especial empeño en autodestruirnos, pensando que, tal vez así, consigamos hacernos más fuertes. Debilitamos nuestros puntos más frágiles sin dar importancia a las grietas que abran en nuestra alma. Nos dedicamos a querer a quién menos nos conviene, pero eso no se elige. Somos capaces de hacer magia. Besamos sin ningún tipo de pudor y decimos te quiero como el que dice hola. Somos unos hipócritas pues aquello de lo que renegamos es lo que termina guiando nuestros pasos. Esquivamos los problemas sin intentar solventarlos, simplemente los evitamos. Tiramos por el camino fácil, pero no es lo correcto. Lloramos para llamar la atención y requerimos del cariño que el mundo nos niega. Sentimos sin sentir realmente y miramos sin ver. Nos desorientamos con las luces de la ciudad y andamos tan perdidos que terminamos encontrándonos.


Al fin y al cabo, sólo somos personas.

No hay comentarios:

Publicar un comentario